La vida de millones de latinoamericanos y caribeños está directamente vinculada a la salud de sus mares. Más del 27 % de la población de esta región vive en zonas costeras, y se encuentran aquí 47 de las 258 ecorregiones marinas del mundo, incluyendo el segundo arrecife de coral más grande del planeta, que se extiende desde México hasta Honduras. En respuesta a esta enorme riqueza ecológica y a los desafíos que enfrenta, CAF – banco de desarrollo de América Latina y el Caribe – anunció una inversión histórica de 2.500 millones de dólares para impulsar la economía azul.
¿Qué es la economía azul?

La economía azul se basa en el uso sostenible de los recursos marinos para el crecimiento económico, la mejora de los medios de vida y la creación de empleos, al tiempo que se preserva la salud de los ecosistemas oceánicos. Este modelo es clave para enfrentar el cambio climático, proteger la biodiversidad marina y garantizar la seguridad alimentaria en las comunidades costeras.
Inversión sin precedentes hasta 2030

Durante el Blue Economy and Finance Forum en Mónaco, CAF duplicó su compromiso previo y anunció que destinará 2.500 millones de dólares hasta 2030, con una estrategia integral de economia azul que prioriza:
- Restauración de ecosistemas marinos como manglares, humedales y arrecifes de coral.
- Desarrollo de tecnologías marinas sostenibles y biotecnología de bajo impacto ambiental.
- Turismo azul y pesca artesanal responsable con enfoque comunitario.
- Descarbonización del transporte marítimo y modernización de puertos verdes.
- Saneamiento y protección de zonas costeras vulnerables, incluyendo inversiones clave en Ecuador, Brasil y El Salvador.
Innovación financiera al servicio del océano
CAF también está explorando mecanismos financieros innovadores, como:
- Bonos azules, que vinculan la inversión al impacto positivo sobre los ecosistemas marinos.
- Canjes de deuda por naturaleza, que permiten condonar deuda a cambio de compromisos ambientales.
- Créditos climáticos enfocados en la biodiversidad y resiliencia costera.
Estas herramientas buscan atraer capital internacional, fortalecer la gobernanza marítima y generar beneficios tangibles para las comunidades locales.
Un modelo regional con proyección global
El presidente ejecutivo de CAF, Sergio Díaz-Granados, afirmó:
“Este importante compromiso financiero no solo refleja el esfuerzo de CAF para proteger los ecosistemas marinos, sino también nuestra ambición de ser el principal catalizador de la economía azul sostenible y regenerativa en América Latina y el Caribe”.
La estrategia “Economía Azul 2030” posiciona a América Latina y el Caribe como líderes en soluciones oceánicas, alineadas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el Acuerdo de París y la próxima Conferencia de la ONU sobre los Océanos (Niza, junio 2025).